Práctica de pH. Medición del pH de orina y saliva en distintas condiciones fisiológicas.

Práctica de pH. Medición del pH de orina y saliva en distintas condiciones fisiológicas.

Objetivo de aprendizaje

  • Describe las variaciones de los valores de pH en la orina y la saliva bajo diferentes condiciones fisiológicas: estado basal, hiperventilación y ejercicio físico moderado.

Resultado de aprendizaje

  • Analiza los mecanismos que modifican el pH en el organismo y sus respuestas compensatorias.

Glosario de términos

Ácido: Sustancia química capaz de ceder protones (H+) a otra sustancia química.

Amortiguador: Son sustancias que resisten los cambios del pH y responden de inmediato a los desequilibrios del estado ácido base.

Anión: Ion con carga eléctrica negativa,​ es decir, que ha ganado más electrones.

Base: Sustancia química capaz de captar protones (H+) de otra sustancia química.

Catión: Ion con carga eléctrica positiva, es decir, que ha perdido electrones.

Ecuación de Henderson-Hasselbach: Se utiliza para calcular el pH de una solución buffer o tampón, a partir del pKa (la constante de disociación del ácido) y de las concentraciones de equilibrio del ácido o base, del ácido o la base conjugada.

Ion: Átomo o molécula que tiene una carga eléctrica positiva o negativa.

pH: una medida que indica la acidez o la alcalinidad del agua. Se define como la concentración de iones de hidrógeno en el agua. La escala del pH es logarítmica con valores de 0 a 14.

Protón: Son las partículas con carga positiva que se encuentran dentro del núcleo de un átomo, para el caso de este tema, protones serán H+.

  1. Introducción

 

El mantenimiento del pH del medio interno, dentro de unos límites estrechos, es de vital importancia para los seres vivos. Es una de las constantes que el organismo trata de mantener con más tenacidad, por ser fundamental en la actividad enzimática y otras funciones vitales.

 

Diariamente el metabolismo intermedio va a generar una gran cantidad de ácidos, pese a lo cual, la concentración de hidrogeniones [H+] libres en los distintos compartimentos corporales va a permanecer fija dentro de unos límites estrechos.

 

Ello es debido a la acción de los amortiguadores fisiológicos que van a actuar de forma inmediata impidiendo grandes cambios en la concentración de hidrogeniones, y a los mecanismos de regulación pulmonar y renal, que son en última instancia los responsables del mantenimiento del pH.

 

1.1 Protón

 

Núcleo electropositivo del átomo de hidrógeno ordinario. Partícula elemental y estable. Cuando se disuelve el hidrógeno en agua se ioniza en H+ y un electrón. Los núcleos de todos los elementos contienen un número de protones señalado por el número atómico del elemento.

 

1.2 Ácido y base

 

Siguiendo la definición de Bronsted, un ácido es aquella sustancia capaz de ceder iones H+ y una base es aquella capaz de captar iones H+. Existen dos clases de ácidos importantes en fisiología: Ácido carbónico (H2CO3) y Ácidos no Carbónicos. Hacer esta distinción es importante debido a las diferentes tasas de producción y rutas de eliminación de estos ácidos. Los ácidos y bases se pueden clasificar en fuertes y débiles. Son ácidos y bases fuertes aquellos para los que, en concentraciones ordinarias, prácticamente todas sus moléculas están disociadas. Los ácidos y bases débiles tienen constantes de ionización pequeñas, de forma que cuando se disuelven con concentraciones ordinarias de agua gran parte de sus moléculas se mantienen sin disociar.

 

1.3 Acidez de una solución

 

Depende de su concentración en H+ con independencia de la sustancia disociada que lo libera

 

1.4 Constante de disociación

 

La constante de disociación ácida K se puede definir como una relación entre las concentraciones de ácido disociado y sin disociar.

 

Kc= ([A] • [B]) / [AB]

 

En los ácidos fuertes K adquiere mayor valor, dado que las concentraciones de A y B serán altas y la concentración AB (ácido sin disociar) será baja. Si el valor de K para un ácido es bajo, esto significa que es un ácido débil, se disocia escasamente, por lo tanto, las concentraciones de A y B serán bajas, y la concentración de AB será elevada.

 

Por lo tanto, podemos decir que la constante de disociación ácida K, es una medida cuantitativa de la fuerza de un ácido.

 

Una sustancia disociable en solución libera electrolitos, alcanza siempre un nivel en el que se estabiliza una fracción disociada y otra sin disociar. En ese momento la velocidad de disociación y la de reconstrucción son idénticas.

 

1.5 Ley de acción de masas

 

La ley de acción de masas postula que la velocidad de una reacción es proporcional al producto de las concentraciones de sus reactantes. Conforme se va agotando la sustancia disminuye la velocidad de disociación hasta igualar a la reconstrucción.

 

Por ejemplo: el agua puede disociarse en hidrógeno e hidroxilo:

 

H2O H+ + OH

 

1.6 pH

 

Logaritmo inverso de la concentración de hidrogeniones, expresa la cantidad de H+ de una solución. Expresar cifras tan bajas de concentración (nanogramos) es incómodo por lo que la obtención de su logaritmo negativo proporciona cifras de más fácil comprensión y por tanto más fácil manejo. Tabla 1

 

 

Tabla 1. Relación entre el pH arterial y la concentración de H+

 

1.7 Anión Gap

 

Para mantener la electroneutralidad, las cargas positivas (cationes) deben igualar a las cargas negativas (aniones); si no ocurre así, aparece un anión gap cuyo valor normal es de 8 a 16 mEq/l y que se calcula con la siguiente ecuación:

 

Anión Gap = Na+ – (Cl+ HCO3)

 

Tendemos a la acidosis: el metabolismo diario genera 13000-15000 mmol/d de CO2 que podría generar 13.000 mEq de H+ cada día y otros ácidos aportados, por ejemplo, por la dieta (aporta ácidos orgánicos, aminoácidos azufrados, residuos fosfato y sulfato) que aportan unos 70 mEq de H+ también cada día. En condiciones normales la concentración de H+ del líquido extracelular es baja (de unos 40 nEq/l). A pesar de ello, pequeñas fluctuaciones de esta van a tener repercusiones importantes sobre determinados procesos vitales. Por ello, existen unos límites relativamente estrechos entre los cuales la concentración de H+ es compatible con la vida. Dichos valores oscilan entre 16 y 160 nEq/l, lo que equivale a un valor de pH de 7.80 a 6.80 (Tabla 1).

 

El principal producto ácido del metabolismo celular es el dióxido de carbono (CO2) que viene a representar un 98% de la carga ácida total. Aunque no se trate de un ácido, pues el CO2 no contiene H+, se trata de un ácido potencial ya que su hidratación mediante una reacción reversible catalizada por la anhidrasa carbónica (A.C.) va a generar ácido carbónico.

 

CO2 + H2O ↔ H2CO3 ↔ H+ + HCO3

 

Al ser un gas, el CO2 va a ser eliminado prácticamente en su totalidad por los pulmones sin que se produzca una retención neta de ácido, por lo que se denomina ácido volátil. Por otra parte, el metabolismo va a generar una serie de ácidos no volátiles, también denominados ácidos fijos que representan de un 1-2% de la carga ácida y cuya principal fuente es el catabolismo oxidativo de los aminoácidos sulfurados de las proteínas. Estos ácidos fijos no pueden ser eliminados por el pulmón siendo el riñón el principal órgano responsable en la eliminación de estos.

 

1.8 Alteración del pH

 

Las desviaciones de la normalidad del pH pueden ser hacia la acidosis o hacia la alcalosis. Tanto una como otra pueden depender de variaciones del bicarbonato o de la presión parcial de CO2. En el primer caso el trastorno se califica metabólico y en el segundo respiratorio. Por otra parte, la anormalidad puede estar compensada o descompensada, lo primero cuando los sistemas controladores del pH no afectados por la causa del trastorno consiguen que se mantenga el pH dentro de límites normales y lo segundo cuando no lo logran por haber sido desbordados. (Tabla 2)

 

 

Las consecuencias de la alteración del equilibrio ácido-base son la alteración de la distribución de los iones en los espacios intra y extracelular, lo que modifica la actividad de numerosas enzimas, se producen cambios estructurales en las macromoléculas y alteraciones en equilibrios químicos. Si los trastornos son graves comprometen la vida.

 

Es tan importante el mantenimiento del pH que hay varios sistemas de compensación que funcionan de forma alternativa, de forma que la disfunción de alguno de ellos debe ser compensada por otro; unos son de actuación inmediata y otros lenta pero definitiva.

 

Existen unos sistemas de compensación inmediatos que se denomina amortiguación y que se produce en segundos; posteriormente entra en funcionamiento el sistema de compensación pulmonar cuya acción se produce en horas y finalmente se produce la compensación renal que puede tardar varios días en corregir la sobrecarga.

1.9 Amortiguadores

También denominados sistemas tampón o “buffer” (almohadilla o muelle). Representan la primera línea de defensa ante los cambios desfavorables de pH gracias a la capacidad que tienen para captar o liberar protones de modo inmediato en respuesta a las variaciones de pH que se produzcan. (Figura 1).

 

Fig. 1. Distribución de los sistemas “Buffer”

 

Un sistema tampón es una solución de un ácido débil y su base conjugada:

H (ácido) ↔ H+ + A (base)

El valor de pH en el cual el ácido se encuentra disociado en un 50% se conoce como pK. El pK representa el valor de pH en el que un sistema tampón puede alcanzar su máxima capacidad amortiguadora. Por tanto, cada sistema buffer tendrá un valor de pK característico. Cuando ingresan radicales ácidos en el medio interno se combinan con el catión de la sal y la consecuencia es la disminución de ésta y el aumento del ácido, pero como éste último es débil, (lo que significa que está poco disociado) el resultado final es que un ácido fuerte que aportaría muchos hidrogeniones se transforma en uno débil y apenas varía el pH.

 

1.9.1. Amortiguadores proteicos

 

Las proteínas intracelulares con sus grupos ionizables con diferentes valores de pK contribuyen de forma importante en el mantenimiento del pH, mediante el intercambio de H+ con iones unidos a proteínas que se desplazan al medio extracelular para mantener la neutralidad eléctrica.

 

Especial mención merece el sistema amortiguador hemoglobina, es un tampón fisiológico muy eficiente debido tanto al cambio de pK que experimenta al pasar de la forma oxidada a la reducida, como a la gran abundancia de esta proteína en la sangre (15% del volumen total sanguíneo) y al hecho de que actúa dentro de los hematíes:

 

HbH+ ↔ Hb + H+

 

Las propiedades amortiguadoras de la hemoglobina desempeñan un papel fundamental en el transporte sanguíneo del CO2 tisular hasta su eliminación pulmonar. En el interior del hematíe, por acción de la Anhidrasa Carbónica, el CO2 se va a convertir en ácido carbónico que se disocia dando un H+ que rápidamente será tamponado por la hemoglobina, y bicarbonato que saldrá del hematíe en intercambio con iones cloro.

 

1.9.2. Amortiguador fosfato

 

Ejerce su acción fundamentalmente a nivel intracelular, ya que es aquí donde existe una mayor concentración de fosfatos y el pH es más próximo a su pK (6.8). Interviene junto a las proteínas celulares de manera importante en la amortiguación de los ácidos fijos:

 

PO4 H2 ↔PO4 H + H+

 

1.9.2. Amortiguación ósea

 

El hueso interviene en la amortiguación de la carga ácida captando los H+ en exceso o liberando carbonato a la sangre por disolución del hueso mineral. El papel más importante del hueso en la amortiguación ocurre en situaciones de acidosis crónica tales como en los casos de insuficiencia renal crónica en la que la parathormona juega un papel fundamental. Este sistema de amortiguación también va a intervenir en presencia de una carga básica a través del depósito de carbonato en el hueso.

 

1.9.3. Amortiguador carbónico/bicarbonato

 

Poco potente desde el punto de vista químico, (pK =6.1). Es el tampón más importante en la homeostasis del pH porque:

 

  • Está presente en todos los medios tanto intracelulares como extracelulares. En el medio extracelular la concentración de bicarbonato es elevada (24 mEq).
  • Es un sistema abierto: la concentración de cada uno de los dos elementos que lo componen son regulables: el CO2 a nivel pulmonar y el bicarbonato a nivel renal.
  • La suma de las concentraciones del ácido y de la base no es constante, lo cual aumenta muchísimo su capacidad amortiguadora. La relación existente entre el ácido y la base nos viene dada por la ecuación de Henderson-Hasselbalch:

 

pH = pK + Log [HCO3] / [H2 CO3]

o

pH = pK+ Log [ HCO3] / [ PaCO2]

 

Cualquier cambio de pH se va a traducir como una alteración de la relación carbónico/bicarbonato, puesto que el pH prácticamente solo va a depender de dicha relación y no de los valores absolutos de las concentraciones de ambos. Por tanto, si la relación carbónico/bicarbonato se eleva por encima de 20/1 estaremos ante una situación de alcalosis y si la relación es inferior a dicho valor se tratará de una acidosis. Es importante tener en cuenta que todos los sistemas “buffer” están interrelacionados y que se amortiguan unos a otros, de modo que todos los amortiguadores de un mismo compartimento van a variar conjuntamente ante un cambio en el pH. Esto nos va a permitir conocer los cambios de cada sistema si conocemos los que ha experimentado uno de ellos. En la clínica el sistema que se mide para la valoración del estado ácido-base es el sistema carbónico/bicarbonato.

 

1.10. Sistemas de compensación

 

Ninguno de los sistemas de amortiguación de pH que acabamos de ver es capaz de eliminar del organismo los hidrogeniones en exceso ya que van a intervenir de forma inmediata minimizando, pero no impidiendo cambios en el pH, por lo que es necesario inducir posteriores respuestas compensatorias pulmonar y renal.

 

1.10.1. Compensación respiratoria

 

La respiración elimina CO2, que como hemos visto equivale a eliminar un ácido, el carbónico. La acidosis, lo mismo por un aumento de CO2, que, por ácidos fijos, es un estímulo para la ventilación. La respuesta ventilatoria ante los cambios de pH es rápida. Está mediada por los quimiorreceptores de los corpúsculos carotídeos y aórticos y del centro respiratorio bulbar. El descenso de pH estimula a los quimiorreceptores provocando una hiperventilación, aumentando la eliminación de CO2 y disminuyendo la pCO2 arterial. La acción de los pulmones para compensar trastornos no dependientes de anormalidades de la función respiratoria se inicia, como la de los tampones, inmediatamente, pero tarda varias horas en alcanzar la eficacia plena. También es limitada, porque la ventilación sólo puede aumentar y, sobre todo, disminuir hasta cierto punto, por lo que precisa la ayuda del riñón para la compensación completa.

 

El aumento de pH inhibe los quimiorreceptores provocando un descenso rápido de la ventilación, una reducción de la eliminación de CO2, y por tanto una elevación de la pCO2 arterial. Es menos eficaz porque se acompaña de una disminución de la pO2 que estimula el centro respiratorio.

 

1.10.2. Compensación renal

 

El riñón es el principal órgano implicado en la regulación del equilibrio ácido-base por dos motivos fundamentales:

 

  • Es la principal vía de eliminación de la carga ácida metabólica normal y de los metabolitos ácidos patológicos.
  • Es el órgano responsable de mantener la concentración plasmática de bicarbonato en un valor constante, gracias a su capacidad para reabsorber y generar bicarbonato de modo variable en función del pH de las células tubulares renales.

1.10.2.1 Reabsorción renal de bicarbonato

Los riñones reabsorben la mayor parte de los mEq de HCO3 que filtran diariamente. El bicarbonato es filtrado continuamente hacia la luz del túbulo renal (generalmente asociado a iones Na+) de modo que en el filtrado glomerular intacto la concentración de bicarbonato es prácticamente igual a la del plasma, de ahí la importancia del proceso de reabsorción de este.

 

Los iones bicarbonato filtrados se reabsorben por la interacción con iones hidrógeno en los túbulos. El efecto neto es una reabsorción de bicarbonato. Los iones bicarbonato que realmente pasan al líquido extracelular no son los mismos que se filtraron a los túbulos. Los iones bicarbonato se «titulan» en los túbulos frente a los iones H+. En condiciones normales, las cantidades de estos dos iones que penetran en los túbulos son casi iguales y se combinan entre ellos para formar CO2 y H2O. Cuando existe un exceso de iones bicarbonato respecto a la de iones H+en la orina -alcalosis metabólica- el bicarbonato no se reabsorbe y se excreta en la orina. En la acidosis, por el contrario, existe un exceso de iones H+ con respecto a la de iones bicarbonato, lo que hace que la reabsorción de bicarbonato sea completa.

 

1.10.2.2. Producción renal de Bicarbonato

Si a pesar del proceso de reabsorción la concentración de bicarbonato plasmático permanece por debajo del valor normal, en las células tubulares se va a sintetizar bicarbonato. Esto sucede fundamentalmente en el túbulo contorneado distal a partir del CO2 procedente de la sangre o del propio metabolismo de la célula tubular por acción de la anhidrasa carbónica. El H2CO3 así generado se disocia en bicarbonato, que se reabsorbe hacia la sangre, y un hidrogenión, que es eliminado. En este caso los hidrogeniones sí van a acidificar la orina, de ahí la gran importancia de los amortiguadores urinarios.

 

Aproximadamente un tercio de los H+secretados van a ser titulados sobre fosfato y el resto sobre amoníaco, siendo por tanto mínima la cantidad de ácido libre que se elimina por la orina.

 

La producción renal de amoníaco representa aproximadamente un 60% en la eliminación de H+asociada a ácidos no volátiles. Este se va a producir principalmente por desaminación de la glutamina en las células del túbulo renal y difunde fácilmente a través de la membrana hacia la luz del túbulo donde, se combina con H+formando iones amonio, un ácido muy débil que es eliminado por la orina.

 

Llamamos acidez titulable de la orina a la que se puede medir, lo cual no indica el total de H+secretados, ya que los iones amonio, por su debilidad, prácticamente no contribuyen a la acidez titulable, y los H+amortiguados con bicarbonato se van a eliminar formando parte de una molécula de agua. Por este motivo la acidez titulable corresponde casi en su totalidad a los hidrogeniones que se encuentran como fosfato.

 

¡Recuerda!

 

A pesar de la gran cantidad de hidrogeniones que se generan diariamente en el metabolismo humano, el pH (que representa el logaritmo inverso de la concentración de hidrogeniones) se mantiene constante. Los iones medibles séricos se representan por el anión gap definido como la diferencia entre la concentración de sodio y las de cloro y bicarbonato, cuyo valor normal se sitúa entre 8 y 16 mEq/L y cuyo aumenta indica un incremento en la concentración de cationes que no han sido medidos directamente. El principal ácido del organismo es el CO2, ácido volátil que se elimina por los pulmones y que representa el 98%, mientras que el 2% restante (ácidos fijos) se deben eliminar por los riñones.

 

Ante los cambios de pH el organismo reacciona de forma que intenta compensarlo por medio de tres sistemas:

 

  1. Los amortiguadores o tampones, formados por ácidos débiles y su base conjugada (hemoglobina, fosfato, el carbonato óseo y el carbónico/carbonato);
  2. El sistema de compensación pulmonar, que mediante la mayor o menor eliminación de CO2 debido a la estimulación o inhibición de los quimiorreceptores por la pCO2 sérica; y
  3. La compensación renal, mediante la reabsorción de HCO3 y la producción renal de amoníaco. Se denomina acidez titulable de la orina a aquella que se puede medir en la orina y que corresponde prácticamente en su totalidad a la que se halla en forma de fosfato, dado que la cantidad eliminada en forma de amonio y de hidrogeniones amortiguados con bicarbonato es mínima

 

2. Actividades en clase

    2.1. Materiales

    • Potenciómetro calibrado para la medición de pH.
    • Soluciones tampón de pH 4.0, 7.0 y 10.0 para calibración del potenciómetro.
    • Vasos y tubos recolectores para muestras de orina (a) y saliva (b).
    • Guantes desechables y materiales de higiene (toallitas, gel desinfectante, etc.).
    • Cronómetro o temporizador.
    • Registro para anotar los datos obtenidos.
    • Equipo básico para realizar ejercicio (por ejemplo, cuerda para saltar o espacio para trotar en el lugar).
    • Higiene personal: Asegúrese de que los participantes no hayan ingerido alimentos ni bebidas en los últimos 30 minutos, ya que esto puede alterar el pH de la saliva y la orina.

     

    2.2 Calibración del potenciómetro

    a) Limpiar el electrodo con agua destilada y secar con papel absorbente, tener mucho cuidado al tocar la punta del electrodo.

    b) Sumerja el electrodo en la solución tampón de pH 4.0 y ajuste el potenciómetro hasta que marque el valor correcto, es importante que la punta del electrodo no toque el fondo del recipiente de la solución.

    c) Realice el mismo procedimiento con las soluciones de pH 7.0 y 10.0 para confirmar la calibración.

    2.3 Procedimiento experimental

    2.3.1 Condiciones basales

    Indique al participante que tome asiento y se encuentre relajado y respire de manera normal durante al menos 5 minutos para estabilizar su estado basal.

         Recolección de muestras:

    1. Pida al participante que recolecte una muestra de saliva en un tubo recolector. Asegúrese de que evite la contaminación con residuos de comida o bebida.
    2. En caso de medir orina, el participante debe recolectar una pequeña muestra reciente en un vaso o tubo estéril.

         Medición del pH basal:

    1. Enjuague el electrodo del potenciómetro con agua destilada.
    2. Introduzca el electrodo en la muestra de saliva u orina y registre el valor de pH.

    2.3.2 Estado de hiperventilación

    Indique al participante que hiperventile durante 1 minuto y medio si el participante se siente mareado suspenda la hiperventilación. 

         Recolección de muestras:

    a) Una vez que el participante ha hiperventilado, pida que recolecte una muestra de saliva en un tubo recolector. Asegúrese de que evite la contaminación con residuos de comida o bebida.

    b) Si es necesario medir el pH de la orina, el participante debe recolectar una pequeña muestra reciente en un vaso o tubo estéril.

         Medición del pH post hiperventilación:

    Enjuague el electrodo del potenciómetro con agua destilada.

    a) Introduzca el electrodo en el nuevo fluído recolectado.

         2.3.3 Estado de post ejercicio

    Indique al participante que realice 3 minutos de ejercicio a libre elección (sentadillas, jumping jacks, abdominales, trote ligero, uso de bicicleta estática si hay en el laboratorio y está disponible etc.)  

         Recolección de muestras:

    a) Una vez que el participante ha realizado 3 min de ejercicio, pida que recolecte una muestra de saliva en un tubo recolector. Asegúrese de que evite la contaminación con residuos de comida o bebida.

    b) Si es necesario medir el pH de la orina, el participante debe recolectar una pequeña muestra reciente en un vaso o tubo estéril.

     

         Medición del pH post ejercicio:

    a) Enjuaga el electrodo del potenciómetro con agua destilada.

    b) Introduzca el electrodo en el nuevo fluido recolectado.

     2.4 Discusión de resultados

    Discuta con sus académicos los resultados sobre la regulación del pH renal y a nivel salival durante condiciones de alcalosis respiratoria.

    La siguiente tabla le puede ser de utilidad para presentar sus resultados:

     

    Saliva

    Orina

    Participante

    pH basal

    pH hiperventilación

    pH ejercicio

    pH basal

    pH hiperventilación

    pH ejercicio

    1

     

     

     

     

     

     

    2

     

     

     

     

     

     

    3

     

     

     

     

     

     

    4

     

     

     

     

     

     

     

    Referencias:

    1. Julia-Sánchez S, Álvarez-Hermsa J, Urdampilletab A, Corbic F, Pagèsa T y Viscora G. Efecto del ejercicio anaeróbico láctico sobre el pH salival. Apunts Med Esport. 2013;48(179):83—88
    2. Foster GT, Vazir ND, Sassoon CS Alcalosis respiratoria, Respir Care. 2001 Abr;46(4):
    3. El texto del marco teórico se basa en la información recuperada de: Fundación para la Formación e Investigación Sanitarias de la Región de Murcia. Sección Volviendo a la básico. Tema 7. Fundamentos del equilibrio ácido-base. Disponible en línea en: http://www.ffis.es/volviendoalobasico/ 2definiciones_y_conceptos_generales.html
    4. Hall, J. E. (2016). Guyton y Hall. Tratado de fisiología médica. 13ª edición. Barcelona, España: Elsevier.
    5. Silverthorn, D. U. (2019). Fisiología humana: un enfoque integrado. 8ª edición. Ciudad de México, México: Editorial Médica Panamericana.

    Referencias:

     

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      Atribución 4.0 Internacional

       

      Control Motor

      Control Motor

      Objetivo de aprendizaje

      Explica el control motor a través de ejercicios de marcha y reflejos musculares y tendinosos.

      Resultado de aprendizaje

      El estudiante describe las bases fisiológicas del desarrollo del movimiento a través de la exploración de los reflejos monosinápticos y polisinápticos musculares y tendinosos.

       

      Glosario de términos

      Músculo: Órgano compuesto principalmente de fibras contráctiles.

      Reflejo: Dicho de un movimiento corporal, una secreción, un sentimiento, etc., que se produce involuntariamente como respuesta a un estímulo.

      Monosináptico: Los reflejos monosinápticos involucran sólo dos grupos neuronales y una sinápsis.

      Polisináptico: Los reflejos polisinápticos, involucran tres o más grupos neuronales y dos o más sinapsis.

      Ganglios basales: Los ganglios basales ayudan a iniciar y suavizar los movimientos musculares, suprimir los movimientos involuntarios y coordinar los cambios de postura.

       

       1. Introducción

      El estudio del control motor permite describir cómo se lleva a cabo la transmisión sistemática de impulsos nerviosos desde la corteza motora hasta las unidades motoras, lo que produce contracciones coordinadas de los músculos y conocemos como movimiento. El movimiento es uno de los principales sistemas mediante el cual podemos interactuar con nuestro entorno y define parte importante de nuestra vida, por lo cual, conocer cómo se lleva a cabo el control motor de nuestro cuerpo es fundamental para poder explorarlo. Para llevar a cabo el movimiento requerimos de la intervención del sistema nervioso central y periférico: la corteza cerebral, el tronco encefálico, el cerebelo, los ganglios basales y la médula espinal.

      Una motoneurona es una neurona que se proyecta hacia las miofibrillas, existen dos tipos: las somáticas y las autónomas, sin embargo, solo se abordarán las somáticas ya que son las que inervan al músculo esquelético.  Las motoneuronas se pueden clasificar de acuerdo con su localización (superior o inferior) y su diámetro axonal (alfa y gama). Las motoneuronas alfa tienen un diámetro de 70 mm, son grandes, y multipolares, además inervan a las fibras musculares extrafusales. Mientras que las motoneuronas gama, tienen un diámetro de 35mm e inervan a las fibras intrafusales.

      Reflejos medulares: dado a que el reflejo es una respuesta predecible, involuntaria y estereotipada, se pueden utilizar para identificar propiedades de las motoneuronas, su integridad o daño. La manera en la que se evalúa es a través del arco reflejo, el cual está integrado por una rama aferente, un centro integrado y una rama eferente.

      Antes de la clase de laboratorio, dibuja aquí el arco reflejo:

       

      Para entender la fisiología de la vía motora, te invitamos a que revises el siguiente video:

      https://www.youtube.com/watch?v=20fwbUgpzXY

      Con la información que acabas de obtener vamos a comenzar con la actividades.

       

      1. Actividad en clase

       

      2.1. Cuestionario previo

      Discute con tus compañeros y en equipos de 2-3 personas respondan las siguientes preguntas:

       

      1. ¿Qué es una motoneurona y cuántos tipos de motoneuronas existen en humanos?
      2. ¿Qué es una unidad motora?
      3. ¿En qué se diferencian las motoneuronas alfa y beta?
      4. ¿Qué es un reflejo?
      5. ¿Por qué son útiles los reflejos para el conocimiento clínico?
      6. ¿Qué son y cuáles son las estructuras de la vía piramidal y extrapiramidal?
      7. ¿Qué es la rigidez por descerebración y porqué se genera?
      8. ¿Qué es la Enfermedad de Parkinson y por qué se genera?
      9. ¿Qué es la Enfermedad de Huntington y por qué se genera?

       

      2.2. Exploración de Fuerza y Tono muscular

      Sujetos: Vas a reclutar a 3 personas: 1) mujer, 2) hombre con poco masa muscular, 3) hombre con mayor masa muscular y vas a replicar cada uno de los métodos con cada participante.

      Métodos: realizaremos 4 maniobras: Maniobra de Barré, Maniobra de Mingazzini, escala de fuerza y valoración de tono muscular.

       

      Maniobra de Barré

      Para realizar esta maniobra, debemos solicitar al participante que cierre los ojos y extienda los brazos con las palmas hacia arriba y que las deje así unos minutos (3 minutos aproximadamente). Debemos observar simetrías entre ambos brazos y ver si existe claudicación de alguno (Figura 1).

       

       

      Figura 1. Maniobra de Barré. El paciente debe tener los ojos cerrados y mantener ambos miembros superiores estirados durante unos 3 minutos y debemos observar si hay simetría en la fuerza para mantenerlos en esa postura o alguno comienza a claudicar.

       

      Maniobra de Mingazzini

      Se debe colocar al paciente en decúbito supino (acostado boca arriba) con la cadera flexionada noventa grados y la rodilla flexionada otros noventa grados y observaremos si alguna de las dos claudica (Figura 2).

       Figura 2. Se pide al paciente que se acueste y se le indica que se coloque como se muestra en la imagen y que lo trate de mantener unos 3 minutos y vemos si claudica alguno de los miembros.

       

      Escala de fuerza

      La fuerza muscular es la capacidad de un músculo o varios de ejercer tensión contra una carga gracias a la contracción muscular. Para evaluarla existen distintas escalas, aquí aplicaremos la Escala de Fuerza de Daniels, tal como se muestra a continuación conjunta a la técnica de exploración.

       

      Escala Definición Forma de evaluarlo
      0 Ausencia de contracción Pedir al paciente que eleve los brazos o piernas contra la gravedad y valorar si lo logra.
      1 Contracción sin movimientos Pedir al paciente que eleve los brazos o piernas contra la gravedad y valorar si lo logra.
      2 Movimientos que no vencen a la gravedad Pedir al paciente que eleve los brazos o piernas contra la gravedad y valorar si lo logra.
      3 Movimientos completos que vencen a la gravedad Pedir al paciente que eleve los brazos o piernas contra la gravedad y valorar si lo logra.
      4 Movimientos con resistencia parcial Pedir al paciente que ejerza contracción cargando un objeto o aplicando fuerza para bajar la mano o pierna del paciente
      5 Movimientos con resistencia máxima Pedir al paciente que ejerza contracción cargando un objeto o aplicando fuerza para bajar la mano o pierna del paciente

       Tabla 1. Escala de fuerza muscular de Daniels.

       

      Tono muscular

      Finalmente debemos explorar el tono muscular, lo haremos en estado de reposo del músculo. Para ello clasificaremos al tono del músculo en atonía (-), hipotonía (+), normotonía (++) o hipertonía (+++).

      Utilizaremos la resistencia de los músculos al movimiento pasivo; para ejecutarlo es muy importante que el paciente no contribuya haciendo contracción muscular para ejecutar el movimiento y sólo el explorador haga distintos movimientos circulares activando los arcos de movimiento de las articulaciones, generando movimientos de extensión y flexión de las extremidades y con ello valorar el tono de cada musculo durante la maniobra.

       

      2.3. Exploración de Reflejos osteotendinosos (ROT)

      Materiales: Martillos de percusión, ver el siguiente video: https://www.youtube.com/watch?v=d9A0TiI4OXM

      Sujetos: Vas a reclutar a 3 personas: 1) mujer, 2) hombre con poco masa muscular, 3) hombre con mayor masa muscular y vas a replicar cada uno de los métodos con cada participante.

      Métodos: En esta práctica vamos a repasar la anatomía de los músculos de cada maniobra, ya que es muy importante que localices los tendones de cada uno.

      En la exploración de los ROT se valora el grado de respuesta en una escala que va de 0 a 4 y se muestra a continuación:

      Valor Descripción
      0 Ausente
      1+ Hipoactivo
      2+ Normal
      3+ Hiperactivo sin clonus
      4+ Hiperactivo con clonus

      Tabla 2. Se muestra la escala de valoración de acuerdo con el grado de respuesta de los ROT.

       

      Vamos a percutir en cada uno de los tendones de los siguientes músculos, es muy importante que la persona se encuentre con el músculo a explorar en relajación.

      Reflejo bicipital: Se sujeta el codo del participante a 90 grados de flexión con el brazo ligeramente en pronación, y se procede a percutir el tendón a través del pulgar y la respuesta normal es la flexión del codo. Se debe realizar de manera bilateral.

       

      Reflejo tricipital: Se sostiene el brazo del paciente en pronación y con el codo flexionado en 90 grados, permitiendo que el antebrazo relajado cuelgue, se percute el tendón del tríceps justo por encima del olecranon. La respuesta normal es la extensión del codo. Se debe realizar de manera bilateral.

      Reflejo rotuliano: Las piernas pueden estar cruzadas una sobre la otra o libres, se debe percutir en el tendón rotuliano de la pierna. El golpe provoca un ligero movimiento de extensión de la pierna debido a la contracción del cuádriceps. Se debe realizar de manera bilateral.

       

       

      Reflejo aquíleo: Para realizar este reflejo, el paciente puede estar acostado. Se lleva la región anterior de la planta logrando la dorsiflexión del pie, elongando de este modo el tendón aquiliano y se realiza la percusión. Se debe realizar de manera bilateral.

       

      2.4.  Función cerebelosa

      Sujetos: Vas a reclutar a 3 personas: 1) mujer, 2) hombre con poco masa muscular, 3) hombre con mayor masa muscular y vas a replicar cada uno de los métodos con cada participante.

      Métodos: Vamos a aplicar técnicas para metria, diadococinesia y prueba de Romberg.

      Metría

      Hace referencia al control de la capacidad de medir la distancia, y la percepción de profundidad. Podemos medirla pidiendo a la persona que toque la punta de su nariz y luego un objeto en nuestra mano, este objeto debemos alejarlo o acercarlo para poder observar cambios en distintas profundidades.

       

      Diadococinesia

      Es la capacidad de realizar movimientos rítmicos alternados. Se solicita al paciente que se siente y que coloque en posición vertical los antebrazos formando un ángulo de 90° con sus brazos y realice movimientos de pronosupinación alternado de ambas muñecas y manos en sucesión rápida.

      Prueba de Romberg

      Esta maniobra es fácil de evaluar y no requiere de equipo especial, se ha utilizado para describir tanto alteraciones cerebelosas como disfunción propioceptiva. Una prueba positiva es la incapacidad de mantener una postura erguida durante 60 segundos con los ojos cerrados. Pediremos al paciente que se ponga completamente de pie sin apoyo y que mantenga los pies juntos y que cierre ambos ojos. Si el paciente se mueve y existe riesgo de caída es una prueba positiva.

      2.5.  Marcha

      Materiales: Videos que el profesor proyectará en la pantalla de TV, sin audio, solo concéntrense en describir la marcha y responder las preguntas, pueden hacerlo en equipo.

      Métodos: A continuación, vamos a ver una serie de videos. De acuerdo con lo que repasamos en el cuestionario previo trata de describir el tipo de afección que puede tener la persona y en dónde se encuentra la lesión.

       

      Video 1. https://www.youtube.com/watch?v=1C3hvOyPB9A

      1. ¿Dónde se encuentra la lesión?
      2. Impresión diagnóstica
      3. Mecanismo fisiopatológico implicado

       

      Video 2. https://www.youtube.com/watch?v=-Dusn7cSh0U

      1. ¿Dónde se encuentra la lesión?
      2. Impresión diagnóstica
      3. Mecanismo fisiopatológico implicado

       

      Video 3. https://www.youtube.com/watch?v=EvFQHTucCz0

      1. ¿Dónde se encuentra la lesión?
      2. Impresión diagnóstica
      3. Mecanismo fisiopatológico implicado

       

      Video 4. https://www.youtube.com/watch?v=mRp0SMN4xwE

      1. ¿Dónde se encuentra la lesión?
      2. Impresión diagnóstica
      3. Mecanismo fisiopatológico implicado

       

      Video 5. https://www.youtube.com/watch?v=rTd0MY-EmHc

      1. ¿Dónde se encuentra la lesión?
      2. Impresión diagnóstica
      3. Mecanismo fisiopatológico implicado

       

      1. Referencias

       

      1. Barrett, K. E. (2013). Ganong fisiología médica (24a. ed.), McGraw Hill Mexico.
      2. Guía para el taller de: semiología neurológica de la titulación de médico (2013). Universidad Técnica Particular de Loja.
      3. Forbes J, Munakomi S, Cronovich H. Romberg Test. 2023 Aug 13. In: StatPearls [Internet]. Treasure Island (FL): StatPearls Publishing; 2023 Jan–. PMID: 33085334.
      4. Koeppen, B. M. and B. A. Stanton (2017). Berne and Levy Physiology E-Book, Elsevier Health Sciences.
      5. Rhoades, R. A. and D. R. Bell (2018). Fisiología Médica: Fundamentos de Medicina Clínica, Lippincott Williams & Wilkins.

       

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      Exploración neurológica. Nervios craneales.

      Exploración neurológica. Nervios craneales.

      Objetivos de aprendizaje

      Demuestra a través de la exploración neurológica, la integración del conocimiento de las bases neuroanatómicas de los nervios craneales.

      Resultado de aprendizaje

      Realiza la exploración neurológica de manera adecuada para los nervios craneales.

      Conoce el sustento de las pruebas de exploración neurológica de los nervios craneales.

      1. Glosario de términos

      Convergencia: Capacidad de dirigir correctamente la mirada de ambos ojos hacía un objeto.

      Dislalia: Alteración de la capacidad del habla que se manifiesta con dificultad para articular las palabras.

      Estrabismo: Pérdida espontánea del paralelismo de los ejes visuales oculares, que puede ser unilateral o bilateral.

      Ptosis palpebral: Hace referencia a la caída del parpado superior.

      2. Introducción

      La exploración neurológica sigue siendo una de las herramientas más valiosas en el ejercicio de la medicina. Aun cuando contamos con nuevos abordajes tecnológicos, conocer las bases anatómicas y fisiológicas del sistema nervioso, nos ayudan a establecer sospechas diagnosticas a bajos costos y realizado de manera adecuada, con bajos riesgos de error. En esta práctica, se revisarán los nervios del cráneo (excepto el II y VIII, que fueron revisados en la práctica anterior), se comentaran los fundamentos de las pruebas aplicadas, así como las correlaciones clínicas que posiblemente puedan encontrarse en personas con alguna lesión o alteración.

       

      Primer nervio craneal (Olfatorio) (Fig. 1)

      Las células receptoras olfatorias son neuronas bipolares con una prolongación periférica que está en contacto con las sustancias odorantes que alcanzan la mucosa olfatoria y una prolongación central que forma las fibras nerviosas olfatorias (el nervio olfatorio o nervio craneal I propiamente dicho) que penetra la lámina cribosa para llegar al bulbo olfatorio. El tracto olfatorio, formado por los axones de las células mitrales y en penacho del bulbo, conecta los bulbos olfatorios con el área olfatoria primaria de la corteza cerebral, (principalmente la corteza piriforme). De ahí, la información olfativa puede alcanzar el tálamo (núcleo dorsal medial) y la corteza orbitofrontal, donde se considera que ocurre la percepción del olfato.

      Figura 1. Anatomía del primer nervio craneal (Olfatorio)

       

      Tercer nervio craneal (Oculomotor) (Fig. 2)

      El nervio oculomotor tiene dos núcleos, el principal y el parasimpático accesorio. El núcleo principal inerva todos los músculos extrínsecos del ojo excepto al oblicuo superior y recto lateral. El núcleo parasimpático hace sinapsis en el ganglio ciliar para pasar por los nervios ciliares cortos hacia el músculo constrictor de la pupila y el músculo ciliar. Este núcleo recibe fibras corticonucleares para el reflejo de acomodación y fibras del núcleo pretectal para los reflejos fotomotores.

       Figura 2. Origen de los nervios craneales III, IV y VI, y su inervación muscular.

       

      Cuarto nervio craneal (Troclear)

      El nervio troclear es el más delgado de los pares craneales y el único que sale por la superficie posterior del tronco cerebral, inerva al músculo oblicuo superior del ojo. Abandona el mesencéfalo e inmediatamente se decusa. Este recibe fibras corticonucleares y tectomedulares que lo conectan con la corteza visual, también fibras del fascículo longitudinal medial el cual lo conecta con los N. III, IV y VIII.

       

      Sexto nervio craneal (Abductor)

      El nervio abductor inerva el musculo recto lateral del ojo. El núcleo motor de este nervio recibe fibras corticonucleares de ambos hemisferios y fibras del fascículo longitudinal que lo conectan con los N. III, IV y VIII.

       

      Quinto nervio craneal (Trigémino)

      El nervio trigémino es el par craneal más grande, de la misma manera es el nervio sensitivo de la mayor parte de la cabeza. Tiene cuatro núcleos: el sensitivo principal, el espinal, el mesencefálico y el núcleo motor. El ganglio semilunar o sensitivo del trigémino está formado por axones de células que recogen información de la piel de la cara y las mucosas. El núcleo sensitivo principal se encarga de la información de la sensación de tacto y presión y el núcleo espinal las sensaciones de temperatura y dolor. Las células del núcleo motor dan lugar a los axones que forman la raíz motora. El núcleo motor inerva los músculos de la masticación, el tensor del tímpano, el tensor del velo del paladar, el milohioideo y el vientre anterior del digástrico. (Fig. 3)

      Figura 3. Divisiones nerviosas del trigémino y su representación sensitiva.

      Séptimo nervio craneal (Facial) (Fig. 4)

      El nervio facial. tiene 3 núcleos:

      Núcleo motor principal se encuentra en la profundidad de la formación reticular de la parte inferior de la protuberancia. La parte del núcleo que inerva a los músculos de la parte superior de la cara recibe fibras de ambos hemisferios, mientras que la parte inferior solo del hemisferio contralateral.

      Figura 4. Anatomía del séptimo nervio craneal (facial)

      Núcleos parasimpáticos: se encuentran por detrás y por fuera del núcleo motor principal, son los núcleos salival superior y lagrimal. El primero recibe fibras aferentes del hipotálamo a través de las vías autónomas descendentes. El segundo recibe fibras aferentes del hipotálamo para las respuestas emocionales, y de los núcleos sensitivos del nervio trigémino para el lagrimeo reflejo secundario a irritación de la córnea y la conjuntiva.

      Núcleo sensitivo: forma la parte superior del tracto solitario. Este recibe las sensaciones del gusto a través de los axones del ganglio geniculado.

      Noveno nervio craneal (Glosofaríngeo) (Fig. 5)

      El nervio glosofaríngeo tiene 3 núcleos:

      Núcleo motor principal: se encuentra en la formación reticular de la médula oblongada y está formado por el extremo superior del núcleo ambiguo. Sus fibras eferentes inervan el músculo estilofaringeo.

      Núcleo parasimpático o salival: inferior recibe vías aferentes del hipotálamo a través de las vías autónomas descendentes, del sistema olfatorio por la formación reticular, y desde el gusto por el tracto solitario. Sus fibras eferentes llegan al ganglio ótico y a la glándula salival parótida.

      Núcleo sensitivo: es parte del núcleo del tracto solitario, recibe información desde los axones periféricos para después ascender y cruzar el plano medial hacia el núcleo espinoso del nervio trigémino.

      El nervio glosofaríngeo sale de la médula oblongada entre la oliva y el péndulo cerebeloso inferior y el cráneo por el orificio yugular, continúa su camino con la yugular interna hasta el músculo estilofaríngeo. Después pasa entre los constrictores superior y medio de la faringe e inerva el tercio posterior de la lengua y la mucosa de la faringe.

      Figura 5 Anatomía e inervación del noveno nervio craneal (glosofaríngeo)

       

      Decimo nervio craneal (Vago) (Fig. 6)

      El nervio vago tiene 3 núcleos:

      Núcleo motor: está en la formación reticular y está formado por el núcleo ambiguo., que participa en el reflejo nauseoso.

      Núcleo parasimpático: forma el núcleo dorsal del vago, recibe fibras del hipotálamo y del glosofaríngeo. Manda fibras eferentes a los músculos involuntarios de bronquios, corazón, esófago, estómago, intestino delgado y grueso.

      Núcleo sensitivo: es la parte inferior del núcleo del tracto solitario, recibe información de las sensaciones por los axones periféricos hacia el núcleo. Las fibras ascienden desde los núcleos y cruzan el plano medio hasta el núcleo espinal del nervio trigémino.

      Figura 6 Anatomía del décimo nervio craneal (Vago)

       

      Onceavo nervio craneal (Accesorio)

      El nervio accesorio es un nervio motor que está formado por la unión de una parte craneal y una raíz espinal. Las fibras forman un tronco nervioso que asciende al interior del cráneo a través del agujero magno, después discurre hacia abajo e inerva los músculos Esternocleidomastoideo y Trapecio. (Fig. 7)

      Figura 7. Anatomía del onceavo nervio craneal (accesorio)

      Doceavo nervio craneal (Hipogloso)

      El nervio hipogloso inerva todos los músculos intrínsecos de la lengua, además de los músculos estilogloso, hiogloso y geniogloso. Su núcleo se encuentra cerca de la línea media por debajo del suelo de la parte inferior del cuarto ventrículo y recibe fibras de ambos hemisferios cerebrales (Fig. 8)

      Figura 8. Anatomía del doceavo nervio craneal (Hipogloso)

      3. Actividad de la sesión.

      Exploración de los nervios craneales.

      Materiales

      1. Odorantes: Esencia de vainilla, tabaco, frutas cítricas, café (no utilizar sustancias irritantes)
      2. Cepillo u algún objeto de punta roma.
      3. Martillo de reflejos
      4. Azúcar, sal o sustancias liquidas con un sabor reconocible
      5. Abatelenguas
      6. Lampara de exploración.

      Primer nervio craneal (Olfatorio)

      Se realiza la exploración en cada fosa nasal por separado. Se le pide al paciente que cierre los ojos y que con un dedo ocluya la fosa contralateral mientras se expone una sustancia para identificar, comparándola con otra, debe de inspirar de 3 a 4 veces por la nariz.

      El paciente debe contestar, si huele o no, si el olor es agradable o no y, por último, si identifica de que olor se trata.

       

      Tercer, cuarto y sexto nervios craneales (Oculomotor, Troclear, Abductor)

      Exploración de la motilidad ocular extrínseca.

      Se le solicita al paciente que siga con la mirada el dedo índice de la mano derecha del examinador, que se desplazará en sentido vertical, horizontal y oblicuo, de izquierda a derecha, hacía arriba y abajo, como si hiciera la forma de una H.(Fig. 9)

      Figura 9. Función de los músculos extrínsecos del ojo.

       

      Trigémino

      Exploración sensitiva.

      Con los ojos cerrados, se realiza haciendo contacto con un pincel o un utensilio de punta roma, se debe realizar de forma simétrica, en ambos lados de la cara y en sentido descendente, desde el vertex hasta el mentón.

      (La exploración dolorosa y termina se explican, pero no se realizarán en el laboratorio de fisiología). Se puede examinar la sensibilidad dolorosa con una aguja, haciendo la misma técnica que en tacto. La sensibilidad térmica se puede explorar con tubos de ensayo que contengan agua caliento y otro fría, se le pregunta al paciente si percibe los estímulos con la misma intensidad de un lado, comparándolo con el otro lado de la cara.

       

      Exploración motora.

      Se evalúan los músculos de la masticación por inspección y palpación (tono y trofismo). Se le pide al paciente que cierre la mandíbula, al mismo tiempo que se palpan los músculos maseteros y temporales, estos deben contraerse de manera bilateral. Para evaluar los músculos pterigoideos laterales, se le solicita al paciente que realice movimientos de lateralización de la mandíbula.

       

      Reflejo corneal.

      Tiene como via aferente el trigémino y como vía eferente, el séptimo nervio craneal (facial). Este reflejo se produce al tocar levemente la córnea (limbo esclerocorneal) con un hisopo de algodón. Se le solicita al paciente que mire hacía arriba y el examinador se acerca desde afuera. El resultado normal se produce con un parpadeo rápido bilateral.

       

      Reflejo superciliar.

      Se obtiene percutiendo la arcada superciliar, con lo que se produce la oclusión palpebral homolateral.

       

      Reflejo glabelar o nasopalpebral.

      Se explora percutiendo a nivel frontal sobre la línea media, y se observa la oclusión palpebral bilateral.

       

      Reflejo maseterino.

      Se le solicita al paciente que entreabra la boca, luego el examinador coloca horizontalmente su dedo índice sobre el mentón y percute sobre el martillo de reflejos de arriba hacía abajo, se observa un movimiento mandibular de ascenso rápido.

       

      Facial

      Exploración de la motilidad

      Se valora en primer lugar con la inspección buscando asimetrías en la expresión facial. Después se evalúan movimientos de la cara, por lo que se le pide al paciente: fruncir el entrecejo, cerrar los ojos, enseñar los dientes e inflar los cachetes. Además, se puede pedir al paciente que cierre los ojos con fuerza y luego el explorador intenta elevar el párpado superior para determinar el grado de resistencia.

       

      Exploración sensitiva

      Consiste en determinar el gusto de los dos tercios anteriores de la lengua usando soluciones acuosas débiles de azúcar o sal.

       

      Exploración autonómica

      Se explora comprobando la producción de lágrimas y de saliva.

      Glosofaríngeo

      Exploración.

      la exploración del nervio glosofaríngeo se puede realizar comprobando la sensibilidad general y gustativa del tercio posterior de la lengua. Para ello con el paciente con la lengua por fuera de la arcada dentaria y los ojos cerrados se toca el tercio posterior de la lengua con un hisopo para comprobar sensibilidad; para comprobar el gusto se sumerge el hisopo previamente en la sustancia a probar.

      Al ver la úvula centrada se puede asumir que no está lesionado el nervio glosofaríngeo. De igual manera se puede provocar el reflejo nauseoso que evalúa al mismo tiempo el glosofaríngeo y el vago.

      Vago

      Exploración.

      Habitualmente se explora junto con el nervio glosofaríngeo, por lo que al observar el reflejo nauseoso también se evalúa el nervio vago.

      Accesorio

      Exploración.

      Para su exploración se debe pedir al paciente que gire la cabeza hacia un lado contra resistencia, lo cual origina que el músculo esternocleidomastoideo del lado opuesto entre en acción. Después hay que pedir al paciente que se encoja de hombros, lo cual ocasiona que entren en acción los músculos trapecios. Hay que observar si hay parálisis o atrofia de los músculos al realizar estas acciones, esto será evidente si existe un hombro caído o debilidad para girar la cabeza

      Hipogloso.

      Exploración

      Para explorarlo hay que pedir al paciente que saque la lengua y observar si hay fasciculaciones, desviaciones de la lengua o atrofia. Posteriormente hay que pedirle que realice movimientos en distintas direcciones con la lengua.

       

       4. Referencias

      1. Guyton & Hall. Tratado De Fisiología Médica. 13 ª Edición. España: Elsevier, 2016.
      2. Rhoades & Bell. Fisiología Médica. Fundamentos de Medicina Clínica. 5a Edición. Wolters Kluer-Lippincott William & Wilkins. 2018.
      3. Snell,Richard. Neuroanatomía clínica. 7ª Ed. Lippincott Williams & Wilkins. 2010.
      4. Kandel, Schwartz, Jessell, Siegelbaum & Hudspeth. Principles of neural Science. 6ª Edición. Mcgraw-Hill. 2021.
      5. Argente y Álvarez. Semiología Médica. (3ª. Ed). Buenos Aires, Argentina: Médica Panamericana; 2021.
      6. Ropper A, Samuels M. Adams y Víctor, Principios de neurología. 9ª ed. México: McGraw-Hill I; 2011.

       

       5. Anexos

       

      Alteraciones de algunos nervios craneales.

      Parálisis del tercer nervio craneal (oculomotor)

      Esta puede ser completa o incompleta.

      La parálisis completa genera, ptosis palpebral, desviación del globo ocular hacía abajo y afuera, dilatación o midriasis pupilar y ausencia del reflejo pupilar directo y consensual en el ojo afectado. (Fig. 10)

      Figura 10.  Parálisis del III Nervio craneal derecho en un paciente con infección por VIH y criptococosis meníngea. Observa la ptosis palpebral (foto superior), la midriasis y la desviación del ojo hacía afuera y abajo al abrirlo (foto inferior).

      Parálisis del cuarto nervio craneal (troclear)

      Su parálisis es la causa más frecuente de estrabismo vertical adquirido. Durante la exploración neurológica se observa la imposibilidad de descender el ojo aducido y la tendencia a la aducción. (Fig. 11)

      Figura 11.  síndrome del seno cavernosos izquierdo en un paciente con macroadenoma hipofisiario. Observa la caída del parpado, la leve ptosis, la midriasis y la incapacidad de aducción del ojo izquierdo por lesión en el III nervio craneal. La imposibilidad de llevar el ojo hacia afuera por lesión del VI nervio; y hacía abajo y hacía adentro por la lesión del IV nervio craneal.

       

      Parálisis del sexto nervio craneal (abductor)

      Es la parálisis más común de las parálisis oculomotoras. En esta, el ojo presenta estrabismo convergente por predominio del recto interno e impedimento de la abducción. Los pacientes tienen diplopía horizontal cuando intenta mirar hacía el lado del musculo paralizados. (Fig.12 )

      Figura 12.  Parálisis del VI nervio craneal derecho en una paciente con antecedente de hiperlipidemia y tabaquismo. A. Limitación de la abducción del ojo derecho. B. En la posición primaria de la mirada no se observa desviación. C.  La aducción del ojo derecho es normal.

       

      Parálisis facial central

      Se produce por la lesión del haz corticobulbar, en esta se observa la parálisis de la mitad inferior de la cara, con relativa integridad de la mitad superior. Se presenta borramiento del surco nasogeniano homolateral, desviación de la comisura bucal hacía el lado opuesto. A pesar de la fuerza de los músculos de la mitad superior de la hemicara esta conservada debido a la doble inervación, es frecuente que los pacientes no puedan ocluir aisladamente el ojo del lado enfermo sin hacerlo en conjunto con el sano (signo de Ravilliod)

      Parálisis facial periférica.

      Es producida por la lesión del núcleo o de cualquier parte de su trayecto periférico. El paciente presenta aplanamiento de las arrugas frontales, descenso de la ceja, imposibilidad de ocluir el parpado, con epifora o lagrimeo. Cuando se le pide que cierre los ojos, el ojo del lado paralizado se dirige hacía arriba y queda a la vista la esclerótica (signo de Bell) (Fig. 13). Si se le solicita que dirija la mirada hacía abajo, el ojo paralizado excursiona más que el contralateral (signo de Negro)

      Figura 13. Parálisis Facial periférica izquierda. A. Al solicitar la elevación de las cejas, se observa la falta de contracción de los músculos superciliar y frontales izquierdos. B. Al solicitar que cierre los ojos, se observa la parálisis del orbicular izquierdo y el globo ocular rota hacía arriba (Signo de Bell)

       

      Alteración del doceavo nervio craneal (hipogloso)

      Es infrecuente su compromiso aislado y habitualmente se asocia a la afectación de otros nervios craneales (IX y X). Cuando existe una lesión unilateral, al protruirla voluntariamente, se observa una desviación hacía el lado afectado por la acción del musculo geniogloso sano. Además, existe una hemiatrofia lingual homolateral, a veces con fasciculaciones. (Fig. 14) La parálisis bilateral produce una marcada dislalia, asociada a trastornos de la masticación y la deglución.

      Figura 14. Lesión del doceavo nervio craneal izquierdo (hipogloso).

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      Fisiología de la actividad eléctrica del cerebro: electroencefalografía

      Fisiología de la actividad eléctrica del cerebro: electroencefalografía

      Resultado de aprendizaje

      El estudiante:

      Analiza los fundamentos fisiológicos básicos de la electroencefalografía.

      Identifica los principales tipos de ritmos que conforman el electroencefalograma (EEG).

       

      1. Introducción

      En 1875, Richard Caton, publicó la primera evidencia conocida sobre las oscilaciones eléctricas en el cerebro. De sus resultados realizados en modelos animales reportó: «Existen corrientes débiles de direcciones variables que pasan a través del multiplicador cuando los electrodos se colocan en dos puntos de la superficie externa, o un electrodo en la materia gris y otro en la superficie del cráneo«. Además, «la corriente por lo general está en constante fluctuación; el índice de oscilación es generalmente pequeño … En ocasiones, se observan grandes fluctuaciones, que en algunos casos coinciden con los movimientos musculares o cambios en el estado mental del animal». Los primeros registros en humanos fueron reportados por Hans Berger en 1929 y es por esto por lo que se le conoce como el padre de la electroencefalogafía (Ahmed and Cash 2013).

      ¿En dónde se generan estas oscilaciones en el potencial eléctrico?

      Cualquier corriente transmembranal genera una contribución al potencial eléctrico local extracelular; sin embargo, la dimensión de la contribución depende de la intensidad y duración de la corriente. Así, el potencial local de campo medido en un punto va a estar determinado principalmente por los flujos de corriente a través de las membranas de las células más cercanas. Existen múltiples contribuciones a la corriente extracelular provenientes de: 1) el intercambio de información axón-dendritas “actividad sináptica” (en general se acepta que este es el principal contribuyente a las oscilaciones observadas en un registro de EEG (Schomer and Da Silva 2018)); 2) corrientes generadas por potenciales de acción; 3) corrientes intrínsecas u oscilaciones espontáneas en el potencial de membrana de las células; 4) sinapsis eléctricas; 5) fluctuaciones lentas en el potencial eléctrico de células gliales.

      En resumen, el electroencefalograma es el resultado de la suma de los potenciales eléctricos locales, que son básicamente despolarizaciones e hiperpolarizaciones a través de las membranas neuronales. Los factores que determinan que un potencial sea registrado en la superficie dependerá de su voltaje, grado de sincronía en las descargas, organización anatómica de las células involucradas, área cortical involucrada, sitio de participación cortical respecto a las circunvoluciones, distancia hacia los electrodos, elección de los montajes de los electrodos, y la resistencia de los electrodos.

      El intercambio de información entre las células del sistema nervioso se da por medio de corrientes eléctricas. En conjunto, esta actividad neuronal da origen a variaciones del potencial eléctrico en el espacio extracelular, variaciones en espacio y tiempo que pueden ser registradas y estudiadas para caracterizar sistemas neuronales. Estas oscilaciones en el potencial eléctrico local se han categorizado en diferentes bandas de frecuencia bien definidas (ritmos) que van aproximadamente desde 0.05 Hz hasta 500 Hz (en la Fig. 1 se ejemplifican las bandas de mayor uso en la clínica).

      Fig. 1. Ritmos clásicos que se evalúan en un EEG en la clínica.

      Diferentes ritmos se han sido asociado a la activación de redes locales de neuronas ligadas transitoriamente por conexiones dinámicas reciprocas. A estas redes se les denomina ensambles neuronales y dentro del cerebro, se piensa que la computación de todo acto cognitivo reside en el surgimiento de un ensamble neuronal específico (Varela, Lachaux et al. 2001, Barrett 2013). Al efectuar un electroencefalograma (EEG), los electrodos se colocan en lugares estándares y se organizan en diferentes montajes que permiten enfatizar diferentes características de las oscilaciones normales o patológicas. En el registro se obtienen una variedad de ondas diferentes para cada derivación (Roy 2017). Cada derivación del EEG representa la diferencia de potencial a lo largo del tiempo, registrada entre dos electrodos. Para fines de aplicación clínica, se consideran básicamente cinco ritmos: alfa, beta, theta, delta y gamma, a continuación, describiremos brevemente las características de uno de ellos (Barrett 2013, Koeppen and Stanton 2017, Rhoades and Bell 2018).

       

      1. Alfa (8 a 13 Hz; y bajo voltaje con amplitudes medias entre 30 y 50 µV)

      El ritmo Alfa aparece cuando el sujeto está relajado en estado de vigilia y con los ojos cerrados. Es bloqueado o atenuado por la apertura de ojos y el esfuerzo mental, tal como hacer cálculos o concentrarse en una idea. Es por ello por lo que parece indicar el grado de activación cortical; mientras mayor sea la activación menor la actividad alfa. Las ondas alfa tienen mayor expresión en ambas regiones occipitales y frontales, con un campo de distribución que alcanza también zonas parietales y temporales posteriores. La mayoría de los sujetos normales presentan una asimetría del ritmo alfa, a menudo, la amplitud es mayor en el hemisferio derecho. En niños se puede registrar desde los 6 años, pero a los diez ya está perfectamente establecido.

       

      1. Beta (13 a 30 Hz y voltaje <20 µV).

      Se observa en individuos despiertos, alertas y con los ojos abiertos, este ritmo es dominante si se encuentra en actividad mental y preferentemente se observa en regiones anteriores (frontales). Su distribución es fronto-central y puede haber reactividad ante estímulos táctiles y actividad motora de las extremidades contralaterales. Puede estar ausente o reducido en áreas con daño cortical y ser acentuado por drogas hipnóticas o sedantes.

      1. Theta (4 a 8 Hz; con mayor amplitud >30 µV).

      Se registra en sujetos durante el sueño, principalmente el sueño MOR (Movimientos Oculares Rápidos). El ritmo theta no se ve en un adulto despierto, pero es normal en niños despiertos hasta la adolescencia. Su distribución preferentemente está en las regiones de los lóbulos temporales. Algunos investigadores separan esa banda de frecuencias en dos componentes, la actividad Theta baja (4 – 6 Hz) correlacionada con un estado de vigilia disminuida y somnolencia aumentada, y la actividad Theta alta (6 – 8 Hz) la cual se ve aumentada durante tareas que involucran a la memoria de trabajo.

      1. Delta (entre 0,5 y 4 Hz; y un voltaje muy alto hasta 100 – 200 µV).

      El ritmo Delta es el ritmo dominante en las etapas 3 y 4 del sueño, pero no se ve en el adulto consciente. Tiende a tener la mayor amplitud de todas las ondas componentes del EEG. Su aparición en estado de vigilia representa una patología. En etapas pediátricas puede presentarse y se considera un signo del grado de madurez de la corteza cerebral. En algunas ocasiones los artefactos causados por los movimientos musculares pueden producir ondas en la misma banda de frecuencia.

      1. Gamma (entre 30 y 50 Hz).

      Puede ser asociado con la actividad mental superior, incluyendo percepción y conciencia y desaparece bajo anestesia general. Una sugerencia es que el ritmo Gamma refleja la actividad mental envuelta en la integración de varios aspectos de un objeto (color, forma, movimiento, etc) para formar una imagen coherente.

       

      Al hacer un análisis básico del electroencefalograma se busca identificar visualmente los cambios a lo largo del tiempo de la frecuencia, amplitud, fase, y morfología de las ondas registradas. En particular se pone atención a:

      • Patrones (amplitud, frecuencia, morfología, duración, sincronia) de acuerdo con la edad.
      • Patrones de acuerdo con el estado de conciencia, vigilia, sueño, coma, etc.
      • Distribución topográfica.
      • Reactividad ante diferentes manobras de activación.
      • Organización de otros grafoelementos normales (Ondas V, ondas lambda, complejos K, husos de sueño).
      • Grafoelementos anormales y condiciones desencadenantes.
      • Artefactos (potenciales miogénicos, movimientos de la lengua, movimientos de los ojos, electrodos, ruido eléctrico de 60 Hz, etc).

       

           El uso cada vez más extendido de computadoras permite el análisis cualitativo de actividad electroencefalográfica, así como la representación compactada por bandas de frecuencia o su presentación topográfica a colores en un esquema de la superficie de la cabeza. En forma simplificada el principio se basa en considerar a la actividad eléctrica cortical como una mezcla de fluctuaciones de voltaje sinusoidales y rítmicas que cubren un amplio rango de frecuencias. Esto se denomina banda de frecuencia o espectro de frecuencia. El espectro de frecuencia se puede descomponer en un número de ondas sinusoidales separándolas por sus diferentes frecuencias, amplitudes y valores de fase. Para hacer el análisis espectral se emplea clásicamente un método conocido como análisis de series de Fourier.

       

      1. Metodología

      Materiales

      1. Electrodos de copa de oro
      2. Pasta conductora Ten 20
      3. Algodón y alcohol
      4. Isopos
      5. Silla
      6. Tela quirúrgica o sanitas
      7. Tijeras
      8. Sistema de registro Cadwell
      9. Actividades en la sesión

      Actividad 1. Colocación de los electrodos y preparación del programa de registro.

      Se realiza la distribución acorde al sistema internacional 10/20 en el cuero cabelludo. Como se muestra en la figura 2.

       

      Fig. 2. Colocación de los electrodos según el sistema 10-20. A) vista lateral y B) vista superior. F = Frontal, C = central, P = Parietal, O = Occipital, A = Auricular.

       

      Instrucciones para colocar los electrodos1:

      1.- Obtenga las siguientes medidas: Inión–nasión cm (pasando por el vértex.) Perímetro cefálico: ___ cm Trago-trago: ____cm (depresión inmediata por delante del pabellón auricular)

      2.- Coloque el electrodo central Cz a la mitad de la distancia entre inión y nasión (50 %) y a la mitad de la distancia trago a trago.

      3.- Medir el 20% de distancia inión-nasión hacia delante de Cz en la línea media colocar Fz y en lado posterior Cz, así completara línea media.

      4.- Seguir con el eje coronal de trago a trago.

      5.- Completar con electrodos frontales F3, F4 y P3, P4.

      6.- Ahora se mide la circunferencia de la cabeza, pasando la cinta métrica por T4 y T3. En este plano y al 20 y 40% de la medida de la circunferencia y por delante de T4 se localiza F8 y FP2, de igual forma en lado izquierdo se localizarán F7 y FP1. Pasar por atrás de T4 también al 20% y 40% de la medida de la circunferencia colocar T6 y 02 y del lado izquierdo T5 Y 01, hasta completar el montaje.

      7.- Coloque referencias en mastoides o pabellón auricular A1 y A2.

      8.- Conecte los electrodos al equipo de registro (Amplificador Easy III, Cadwell) en las entradas correspondientes para cada electrodo. Tener cuidado de no doblar los electrodos, dado que son cables muy finos y se pueden romper fácilmente.

      9.- En el escritorio elija el programa Cadwell, e ingrese los datos del participante, al finalizar elija Start Recording con opción de EEG.

      10.- Verifique que su impedancia sea menor a 5 K. (Figura 3).

      11.- Se recomienda utilizar una sensibilidad de 7.1 µV/mm y una velocidad de 1 segundo/división.

       

      1Nota: Una vez ubicada la región, tome un hisopo y divida a la mitad el cabello, limpie el área con alcohol y luego con pasta Nuprep. Tome la base del electrodo de copa con el índice y cuidadosamente tome una porción de pasta Ten 20. Para fijar el electrodo se recomienda colocar un círculo de tela quirúrgica o sanita, así se fijará mejor el electrodo al cuero cabelludo. Se recomienda que los cables ordenadamente vayan en dirección paralela de lóbulo frontal a parietal.

      Fig. 3. Comprobación de impedancia desde software Easy III: Haga clic en el botón Impedancia de la barra de herramientas Easy III EEG/LTM. Niveles de impedancia que son buenos se mostrarán con fondo de color verde en la entrada. En el ejemplo siguiente, la impedancia es mayor que 20 K, por lo tanto, el color de fondo es de color rojo.

       

      Actividad 2. Registro de electroencefalograma (desarrollo de la práctica)

       

      1.- Identificación de artefactos que se presentan en el EEG.

      • Artefacto de origen muscular: el sujeto presiona con cuidado la mandíbula, aprieta ojos y frunce el ceño durante 10 segundo.
      • Artefacto por movimiento de ojos: Se solicita al sujeto que abra y cierre los ojos o que los mueva de manera horizontal.
      • Artefacto de mover la lengua: Se solicita al sujeto que mueva la lengua dentro de su cavidad bucal
      • Artefacto de movimiento: Mover con cuidado la cabeza de lado izquierdo a derecho.
      • Artefacto de electrodo con alta resistencia: Con cuidado se quita un electrodo del cuero cabelludo para lograr que un canal no registre.
      • Artefacto de ruido de 60 Hz. Se coloca algún aparato eléctrico cerca del amplificador.

       

      2.- Identificación de ritmos alfa y beta.

      El sujeto de estudio permanecerá en posición sentada, en reposo, relajado, con los ojos cerrados y sin moverlos durante los 15 segundos que dura el registro.

      El sujeto de estudio permanecerá en posición sentada, en reposo, relajado, con los ojos abiertos sin moverlos y sin parpadear durante los 15 segundos que dura el registro.

      El sujeto de estudio nuevamente permanecerá en posición sentada, en reposo, relajado, con los ojos cerrados y sin moverlos durante los 15 segundos que dura el registro.

       

      3.- Identificación de estímulos que pueden modificar los ritmos presentes (maniobras de activación).

      Pensamiento abstracto. El sujeto de estudio permanecerá en posición sentada, en reposo, relajado, con los ojos cerrados y sin moverlos durante 20 segundos.

      El sujeto de estudio permanecerá en posición sentada, en reposo, relajado, con los ojos cerrados y sin moverlos durante 20 segundos mientras que realiza cálculos mentales.

      Efecto de la música. El sujeto en posición sentado con los ojos cerrados y con cuidado se le presenta Música Clásica o Música de Rock durante 20 segundos.

      Efecto de la hiperventilación. Sujeto con ojos cerrados sin moverlos, se registran 20 segundos en condiciones basales y después se le pide que hiperventile por 2 minutos, se comparan ambos registros.

      Efecto de la fotoestimulación. Colocar la lámpara estroboscópica frente al sujeto y estimular a diferentes Hz durante 10 segundos.

       

      4.- Cambios en la actividad oscilatoria durante el sueño.

      Si se solicitó al participante desvelarse se pueden registrar algunas fases de sueño, sin embargo, usualmente se requiere que el trazado contenga por lo menos 20 minutos de registro técnicamente satisfactorio.

      1. Referencias
      2. Barrett, K. E. (2013). Ganong fisiología médica (24a. ed.), McGraw Hill Mexico.
      3. Koeppen, B. M. and B. A. Stanton (2017). Berne and Levy Physiology E-Book, Elsevier Health Sciences.
      4. Rhoades, R. A. and D. R. Bell (2018). Fisiología Médica: Fundamentos de Medicina Clínica, Lippincott Williams & Wilkins.

       

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      Fisiología de la actividad eléctrica del cerebro: potenciales evocados

      Fisiología de la actividad eléctrica del cerebro: potenciales evocados

      Resultados de aprendizaje

      • El estudiante analiza las vías auditiva y visual incluyendo las conexiones centrales.

       

      Indicadores de evaluación

      El estudiante:

        • Explica los mecanismos de codificación de la información visual a nivel retina.
        • Identifica la conectividad e interacciones sinápticas de los fotorreceptores.
        • Describe las vías de transmisión de la información visual de la retina a la corteza visual.
        • Identifica los receptores y las fibras nerviosas aferentes que sustentan la vibración, el tacto discriminatorio, el sentido de la posición de la articulación, la termorecepción y la nocicepción y sus conexiones con la corteza cerebral.
        • Explica el análisis de frecuencia realizado por la cóclea en función de sus propiedades físicas.

         

        Introducción

        Se denomina potencial evocado a la actividad eléctrica generada en el tejido nervioso como respuesta a un estímulo. Existen numerosos tipos de potenciales en función del estímulo sensorial realizado (auditivo, visual o somatosensorial).

         

        Vía auditiva

         

        La vía involucrada en el procesamiento del estímulo sonoro es la vía auditiva central, en la cual las fibras aferentes cocleares realizan sinapsis en las neuronas de los núcleos cocleares dorsales y ventrales. Estas neuronas dan lugar a axones que contribuyen a las vías auditivas centrales. Algunos de los axones procedentes de los núcleos cocleares se decusan al lado contralateral y ascienden por el lemnisco lateral, el principal tracto auditivo ascendente. Otros conectan con varios núcleos ipsilaterales o contralaterales, como los núcleos olivares superiores, que se proyectan a través de los lemniscos laterales ipsilateral y contralateral. Cada lemnisco lateral finaliza en un colículo inferior. Las neuronas del colículo inferior se proyectan hacia el núcleo geniculado medial del tálamo, que da lugar a la radiación auditiva. La radiación auditiva finaliza en la corteza auditiva (áreas 41 y 42), localizada en las circunvoluciones temporales transversales del lóbulo temporal.

        Para que una persona pueda percibir un sonido requiere de la activación de la vía auditiva periférica y central, la primera se encarga de la transformación de las variaciones de presión sonora que llegan al tímpano en impulsos eléctricos y la segunda de la interpretación de estos estímulos en el SNC. La activación de la vía auditiva central se puede estudiar mediante potenciales evocados auditivos (PEAs). El parámetro más utilizado para evaluarlos es el tiempo de latencia, definido como el tiempo transcurrido (ms) desde la presencia del estímulo a la visualización de la respuesta. A partir de esta clasificación es posible agrupar a los PEAT (potencial evocado auditivo de tronco cerebral) de latencia temprana, media y tardía.

        El PEAT corresponde a un PEA de latencia temprana que nos permite evaluar la vía auditiva. Para hacerlo se utiliza como estímulo un sonido breve como un “clic”, generados por un estimulador que se coloca en la región mastoidea. El estímulo se aplica en el lado a evaluar mientras se enmascara la audición del otro lado con ruido blanco. La ventaja de este método es que permite evaluar cada vía auditiva por separado.

        En cada oído se registra una serie de cinco ondas y cada una de ellas corresponde con un punto distinto dentro de la vía auditiva central, se observan respuestas en los primeros 10 ms, y tienen gran utilidad clínica como herramienta para la estimación de la audición, así como en el topodiagnóstico de lesiones que afectan al sistema auditivo.

         

        Fig. 1. Relación vía auditiva-respuesta eléctrica. PEA de latencia temprana.

        Los PEAs de latencia media se observan entre los 10 y 50 ms. Su utilidad clínica se encuentra relacionada principalmente con el estudio de las funciones auditivas centrales y como herramienta de neurodiagnóstico, permite la evaluación de estructuras como el tálamo y la corteza.

        Los PEAs de latencia tardía se observan entre los 50 a 500 ms. Este complejo se caracteriza en adultos por presentar tres componentes: P1 (peak positivo alrededor de los 50 ms), N1 (peak negativo alrededor de 100 ms) y P2 (peak positivo entre los 150-200 ms). En relación con los posibles generadores, estos se encontrarían dentro de la corteza auditiva primaria y secundaria. Estos PEAs son de utilidad en el estudio de la discriminación auditiva de tonos y fonemas en poblaciones con autismo, usuarios de implante coclear, para evaluar la plasticidad auditiva, además se pueden utilizar como índice para el pronóstico de recuperación en pacientes en coma.

        Fig. 2. Integración de PEA de respuesta temprana a tardía.

         

        Los potenciales evocados auditivos prometen ser una valiosa técnica de apoyo para el diagnóstico y tratamiento audiológico. Sin embargo, es importante considerar que por sí solos no constituyen una herramienta única de evaluación, sino que deben ser considerados un elemento más dentro de la batería de pruebas que pueden ser utilizadas en clínica.

         

        Vía visual

         

        En la vía visual las fibras de las neuronas ganglionares de la retina forman el nervio óptico o segundo par craneal, que se dirige al quiasma óptico empaquetados en dos partes (la parte nasal y la parte temporal), en el quiasma se entrecruzan y dirigen a través de las cintillas ópticas al núcleo geniculado lateral, una vez haciendo relevo en dicha región talámica pueden salir fibras conocidas como radiación óptica que van hacia el área visual primaria (área 17 de Brodmann), secundaria y terciaria (área 18 y 19 de Brodmann, respectivamente), también esta vía tiene fibras colaterales hacia el colículo superior para regular la actividad de los núcleos de los pares III y IV para los movimientos conjugados.

        En los PEV PATTERN (Cuando se usa el estímulo en forma de tablero de ajedrez) se identifican normalmente tres picos, con variación sucesiva de la polaridad negativa-positiva-negativa respectivamente, con latencias de los picos de 70 ms, 100 ms y 135 ms, la P-100, o primera positividad que ocurre en latencia alrededor de los 100 ms, es la más constante y útil en el estudio clínico. Su latencia normal varía entre 89 y 114 ms con una amplitud de 3-21 µV. y un rango de diferencia máxima entre los dos ojos de 6 ms.

        Metodología

        Materiales

        1. Electromiógrafo con programas de captura y registro para Potenciales evocados
        2. Electrodos de superficie (activo-referencia-tierra)
        3. Gel conductor
        4. Algodón y alcohol
        5. Actividades en la sesión

        Actividad 1. Tomar un registro de Potenciales evocados auditivos y visuales en condiciones normales.

        Actividad 2. Divida al grupo en dos equipos, uno encargado de diseñar un experimento que permita modificar algunas condiciones iniciales del sujeto y elaborar hipótesis sobre como esto afectaría el registro de los PEV o PEA. Aplicar sus conocimientos sobre fisiología para resolver el problema.

         

        Metodología para la prueba de PEA

         

        1. Condiciones del sujeto de experimentación: El voluntario debe encontrarse en reposo, tranquilo y confortable.
        2. Condiciones del registro: Los electrodos que se colocan sobre la piel limpia (favorece una impedancia menor de 5 000 Ohm) siguiendo la técnica 10-20 para EEG, el electrodo activo en posición M1 y M2, dependiendo cual sea el lado estimulado (el registro se hace ipsilateral al estímulo), el electrodo de referencia se coloca en Cz y el de tierra en Fpz.

         

        Características del estímulo:

        Se usan estímulos tipo clic de breve duración (100 µs), con una frecuencia de estimulación de 11.1 Hz para la fase neurológica y 33.1 Hz para la fase audiológica, la ventana de análisis es de 10 ms para la primera y 20 s para la segunda, se utilizan filtros de baja frecuencia (pasa altas) en 150 Hz y de alta frecuencia (pasa bajas) en 3000 Hz. Se obtiene un trazo promedio (de 1000 respuestas obtenidas), además se recomienda realizar una réplica para cada oído a evaluar.

        Se recomienda encontrar el umbral de cada oído, para lo cual, en la fase audiológica se disminuye intensidad de 10 en 10 dB hasta encontrar el umbral para cada oído (la mínima intensidad en donde se evoca la onda V).

         

        Localización de electrodos:

        La localización que se usa consiste en dos electrodos de referencia (en el lóbulo de cada oreja), un electrodo de tierra (en el nasión) y un electrodo activo (en el vertex, Cz).

        Antes de iniciar, asegúrese que el paciente se encuentra cómodo (sentado o en decúbito dorsal) y siempre atento a la aplicación del estímulo.

        • Inicie el programa de registro.
        • Los filtros pasa baja se encontrarán en 10-30 Hz y en 2,500-3,000 Hz (-3 dB).
        • Asegure que el registro esté libre de ruido elé
        • Defina dos canales de registro. El canal 1 es para el oído ipsilateral a Cz, el canal 2 para el contralateral.
        • Registre la actividad eléctrica durante un minuto sin estimulación y verifique que el nivel de ruido eléctrico sea mí
        • Coloque los audiófonos en el sujeto y aplique un estímulo auditivo de frecuencia e intensidad conocidas en uno de los oídos.
        • Use estímulos con las siguientes frecuencias: 5 Hz, 10 Hz, 100 Hz y 200 Hz.
        • Ajuste intensidad del sonido para cada sujeto entre 40-80 dB.
        • Verifique la respuesta fisiológica del individuo (regularmente se observa una serie de ondas en un intervalo de 10 ms).
          • Puede aplicar un sonido blanco (ruido blanco de enmascaramiento en el oído contralateral al estimulado).
        • Una vez registrada la respuesta a un estímulo auditivo almacénela en la computadora.
        • Aplique el resto de las frecuencias de estimulación y almacene cada una de ellas.
        • Repita el procedimiento anterior en el otro oí
          • Entre cada tren de estímulos deje descansar al sujeto durante 5 minutos.
        • Repita el proceso anterior para estimulación biaural.

         

        Metodología para la prueba de PEV

         

        1. Condiciones del sujeto de experimentación:

        El sujeto se sienta cómodamente en una silla, frente a la pantalla de computadora (instalada a 85 cm del nasión).

        1. Previo a la realización del examen se le hace un chequeo de la agudeza visual. Si el sujeto lleva gafas de corrección, el examen de PEV se hace con éstas. Se cubre con un parche negro el ojo que no va a ser examinado.
        2. La respuesta evocada se registra mediante la colocación de electrodos en el área occipital. Se emplea el montaje de Halliday con un mínimo de 5 electrodos colocados de la siguiente forma: el electrodo central en la línea media, a 5 cm por encima del inion; los demás electrodos desde aquel punto lateral 5 y 10 cm a cada lado; estos registran las respuestas de cada hemisferio. Como referencia, se utiliza un electrodo colocado en FZ del sistema 10-20 y un electrodo de tierra se coloca en el lóbulo de una de las orejas del sujeto o bien en FPZ (del sistema 10-20) (Figuras 2 y 3). La impedancia de los electrodos se mantiene estrictamente por debajo de los 5 000 Ohm. Después de la colocación de los electrodos, se procede a oscurecer el cuarto de examen (lo mejor posible).
        3. La técnica para la obtención de los PEV consiste en aplicar un estímulo visual de patrón de cuadros reversibles en un tablero de ajedrez que aparece en la pantalla de la computadora, en el cual el cuadro blanco se vuelve negro y el negro se vuelve blanco con una frecuencia de 2 cambios en un segundo. Este estímulo se presenta por separado en cada ojo al campo visual completo, a cada uno de los hemicampos y al campo central.
        4. La respuesta recogida por los electrodos es amplificada 33 000 veces y filtrada a 0.1-200 HZ. Se promedian 100 barridos de 320 ms de duración.
        5. Para garantizar la exactitud de las respuestas se realiza un mínimo de 2 ensayos prueba.

         

        Procedimiento

        1. Se realiza la exploración de cada ojo por separado, por lo que se ocluye alternativamente cada uno de los ojos con un cartón obscuro, dejando libre el ojo que va a ser estimulado.
        2. La estimulación inicia cuando los cuadrados comienzan a alternarse rítmicamente de forma y color, según una frecuencia establecida, quedando fijo el punto guía en el centro de la pantalla.
        3. Se suelen utilizar dos series de 100 estímulos por cada ojo y en dos frecuencias espaciales diferentes para el tablero de ajedrez, es decir, una frecuencia baja con cuadrados grandes y en menor número y una frecuencia alta con cuadrados más pequeños y en mayor número.
        4. Se le pide a la persona que mire fijamente al punto guía (centro de la pantalla), procurando no perderlo de vista ni distraerse con el movimiento alterno de los cuadrados, debiendo permanecer atento y concentrado.

        Fig. 4. Localización Posterior de los electrodos en los PEV

         

        Actividad de integración

         

        Una vez concluido el procedimiento experimental el profesor guiará la discusión de los hallazgos, haciendo énfasis en los indicadores de evaluación planteados en la práctica.

        Referencias

        • Berne & Levy. Fisiología. 7ª Edición. Madrid: Elsevier. 2018
        • Ganong. Fisiología Médica. Barret, Barman, Boitano & Brooks. 25ª Edición. México: Mcgraw-Hill Interamericana. 2016.
        • S, O. C. (2014). Potenciales evocados auditivos de corteza: Complejo P1-N1-P2 y sus aplicaciones clínicas. Revista De Otorrinolaringología Y Cirugía De Cabeza Y Cuello, 74(3), 266-274. doi:10.4067/s0718-48162014000300012
        • Kandel, Schwartz, Jessell, Siegelbaum & Hudspeth. Principles of Neural Science. 5ª Edición. Mcgraw-Hill. 2012.

         

         

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